Enormes túneles de más de 1000 km de largo excavados por perezosos prehistóricos gigantes en América del Sur hace 10 000 años – Archeology
Se descubrió un túnel misterioso en un sitio de construcción en Novo Hamburgo, Brasil, que había sido excavado por un mamífero gigante hace más de 10,000 años. El profesor de geología Heinrich Frank, que trabaja en la Universidad Federal de Rio Grande do Sul, estaba intrigado por el inusual túnel y se dispuso a averiguar qué criatura podría haberlo excavado.
El túnel estaba lleno de enormes marcas de garras, lo que llevó a Frank a concluir que los túneles, ahora conocidos como “palaeomadrigueras”, probablemente fueron excavados por el perezoso terrestre gigante, también conocido como Megatherium americanum. Esta especie de perezoso terrestre gigante extinto medía hasta 15 pies de alto y pesaba más de 5,000 libras. Se cree que las profundas marcas de garras encontradas en las paredes de las paleomadrigueras solo podrían haber sido hechas por esta criatura gigante.
“No hay ningún proceso geológico en el mundo que produzca túneles largos con una sección transversal circular o elíptica, que se bifurcan, suben y bajan, con marcas de garras en las paredes”, dijo Frank.
Frank y su equipo han encontrado más de 1500 de estos túneles en el estado de Rio Grande do Sul, muchos de los cuales se extienden por cientos de pies y tienen numerosos ramales. El túnel más grande tiene la friolera de 2,000 pies de largo, seis pies de alto y hasta cinco pies de ancho. Sin embargo, los investigadores no están seguros del propósito de estas extensas cavernas y si se usaron para escapar del clima, los depredadores o la humedad.
Megatherium americanum fue descubierto por primera vez en 1787 por Manuel Torres en Argentina y luego el anatomista comparativo Georges Cuvier determinó que era un perezoso. A pesar de sus enormes garras, el animal era vegetariano, como lo confirmaron los análisis químicos de sus dientes. Se cree que M. americanum se superpuso con los humanos y pudo haber estado en el menú hace miles de años, lo que podría haber contribuido a su extinción.
A pesar de los esfuerzos de Frank y otros investigadores, no se han encontrado fósiles dentro de las cuevas, ni ningún material orgánico o depósitos minerales que puedan ayudar a fechar la creación exacta de las madrigueras. La búsqueda para descubrir el misterio de estas criaturas gigantes y sus túneles continúa.